Tradúceme.

martes, 25 de octubre de 2016

Mi corazón


No hay nada, que me impida quererte. Nada se le prohíbe al corazón, aunque se le nieguen muchas cosas. Aunque seamos tan cobardes y  el amor sea lo primero que sacrificamos, porque lo creemos prescindible, sustituible. Porque solo es un sentimiento. Él no entiende de prohibiciones, ni de límites, ni de restricciones. Es totalmente libre, de pensar, de sentir, de creer, de amar. Y contigo, soy toda corazón. Toda fuerza y valor.  Toda amor. Y a pesar de eso, siento que tengo alas, estas alas, y no puedo volar. Solo porque tú crees, que no debemos, que no debes, que no debo.